viernes, 18 de julio de 2014

Killer day

Les cuento mi última aventura/pesadilla...

Todo empezó cuando una amiga me preguntó si quería cuidarle la casa, ya que ella se estaba yendo 3 semanas de viaje. Un detalle a tener en cuenta es que de aceptar me quedaba con la perra de ellos a cargo. Lo pensé 2 minutos y le dije sí. Siempre está bueno cambiar de ambiente, renovar el aire, y ventilar las ideas! Por otro lado, cuidar una perra ajena no es lo ideal, pero como a mí me gustan los perros, pensé que nos podíamos hacer compañía mutua, así que la propuesta me cerraba bien.

La cuestión es que me mudé. La vivienda es una casa chorizo con algunas refacciones. Como todo hogar de varios años, tiene puertas y ventanas muy lindas de hierro y de madera. Además, por un tema de seguridad, tiene algunos patios con rejas verticales y horizontales (como una jaula digamos, aunque les prometo que no da la sensación de encierro, que está muy bien pensado para que sea seguro, y que es una linda casa). En total son 3 patios: uno en el frente todo enrejado, uno intermedio también enrejado, y el patio del fondo que se comunica con el intermedio, pero que está libre de rejas.

El primer día no hubo sobresaltos ni nada en mi nuevo hogar, la vida me sonreía como de costumbre! Pero DANGER! me esperaba un segundo día del infierno!

Resulta que siendo un día divino de mucho sol, abro las ventanas, dejo pasar el calorcito, y le digo a Cata (la perra), "vení, te dejo entrar un rato".... para qué??!!!! caos total. Empezó a correr, empujar cosas y desordenar la casa. La dejé ser libre unos minutos, y después me cansé... "afuera Cata!"... claro que Cata no es ninguna boluda y no quería salir. Así que empezó la persecución para agarrarla y dejarla en el sector del patio del fondo. Una vez que lo consigo, salgo al patio intermedio a través de una puerta doble de madera con pasadores arriba y abajo. Con anterioridad había agarrado la llave de la reja que separa ese patio intermedio con el del fondo (gracias Dios por iluminarme en esa decisión!). El problema surge cuando, para que Cata no se vuelva a meter en la casa, cierro detrás de mi esa puerta de madera (si, la de los pasadores...). Se nota que al cerrarla el pasador hizo clack y se bajó.... lo que significó QUEDARME ENCERRADA AFUERA DE LA CASA Y EN UN PATIO TOTALMENTE ENREJADO!!! HASTA CON REJAS EN EL TECHO!!!!

A partir de ahí empieza la pesadilla. 1ra. decisión: Cata te vas al fondo así no me molestas mientras pienso que hacer. 2do: Intentar empujar la puerta para que se abra... no funciona. 3ro: con una caña hacer palanca para poder abrir la puerta y meter la mano.... no funciona.... DESESPERACIÓN TOTAL! no tenía ni el celular ni la compu a mano para avisar lo que me había pasado! y ahora??? estaba en una jaula sin poder salir!! Cuando me di cuenta que no iba a poder abrir la puerta de ninguna manera sola, volví a una opción que se me había pasado por la cabeza al principio, pero que la descarté por ser una locura.... en mi mano tenía una sola llave, la que me permitía pasar al patio del fondo... así que tomé la decisión, me trepé a la medianera a través de la parrilla, y empecé a caminar entre el techo de la casa, el del vecino, y por momentos solo por la pared de la medianera... si, bien a lo malabarista...o peor... a lo chorro!!! Hice 30 metros bien a lo chorrita y consigo finalmente llegar a la calle. Salto (con la adrenalina no sentí nada en el momento, pero después las piernas y la espalda me recordaron sin piedad mi acto de acrobacia) y empiezo a caminar (sin plata, ni celular en mano) por la calle. Cuatro casas más adelante me encuentro con una agencia de fletes. Veo a un muchacho sentado en el mostrador, le cuento lo que me pasó y le pregunto por algún cerrajero. La cuestión es que me dice “a ver, dejame que busque unas herramientas y vemos si te puedo ayudar”. “Buenísimo, mil gracias!!”. Volvemos a la casa, hacemos malabares nuevamente, y llegamos al famoso patio intermedio. Entre las herramientas, Mario (mi nuevo amigo fletero) haciendo fuerza, y mi mano que sufrió varios raspones, pudimos levantar el endemoniado pasador, lo que gracias a Dios concluyó la pesadilla. A Mario le di un abrazo desde el fondo de mi corazón y le regalé una Corona bien fría que había comprado el día anterior como agradecimiento.

Casi una hora de sufrimiento y nervios llegó a su fin. Me puse a trabajar, me olvidé del tema y seguí adelante.


A la nochecita hago una pasada por mi verdadera casa para buscar algunos víveres y ropa. Vuelvo a la nueva casa y noto que estaba demasiado oscuro… era una boca de lobo…. Toda la zona estaba sin luz…. Mierda!!! Esto también??? Me quedo esperando un rato en el auto. Como no volvía más la luz me fui nuevamente a mi casa real. En el camino lo llamo a mi viejo y le cuento todo lo que me había pasado en este día interminable. A esta altura yo ya estaba super vulnerable, increíblemente cansada y al borde del llanto. Papá me dice “más tarde te acompaño a entrar a la casa, y chequeamos que esté todo bien”. Ah!!! Y otro dato a comentar!!!!!! La llave de la puerta de acceso en la vereda no funciona muy bien!! Así que entre la encerrada al mediodía, el corte de luz, y la cerradura que funciona cuando quiere, me sentí colapsada.

La historia termina bien. El viejo me acompañó a la casa, entramos, chequeamos que todo estuviese bien, y me fui a dormir. Eso si, con una sensación rara… a mi estas cosas no me pasan! Yo tuve siempre un ángel de la guarda increíble y un Dios aparte! Pero bueno, ese día me tocaron todas juntas y tuve que bancármela.

Por suerte hoy mi ángel volvió de sus vacaciones y todo anda nuevamente de maravilla! Es más… en un rato voy a pasar por lo de Mario y le voy a decir “Mario! Me volvió a pasar!!!! …… chistecitooo!” J


martes, 3 de junio de 2014

Brillar


“I fall in love with people’s passion, the way their eyes light up when they talk about the things they love & the way they fill with light”.

Hoy leí esta frase y básicamente resumió uno de mis mayores dilemas existenciales.

 Las personas que me conocen ya me escucharon hablar de este tema muchas veces!  Aún así no deja de ser algo que me preocupa, o mejor dicho, ocupa mi cabeza muy seguido, y repito hasta el cansancio. Cuánta gente que va por la vida apagada! Que se preocupa sólo por cosas superficiales y materiales! Que sólo charlan de temas banales, sin sentimiento, sin pasión. Y peor todavía!! Que se quejan por absolutamente todo! Yo no entiendo por qué tanta gente va anestesiada  por la vida, cuando hay tantas cosas por hacer que nos pueden llenar de emociones, de luz!

Será que la mayoría tiene trabajos que no les gusta? Aunque en teoría ya todos sabemos que no existe el laburo perfecto. Será que en su tiempo libre no tienen ninguna actividad que les fascina? Que no les genere contar los días hasta que eso llegue? Que no tienen algo que los haga vibrar?! Será que eligieron de compañero de vida a una persona que no quieren realmente? Que no los acompañan? Será que se acostumbraron a una vida rutinaria y no dejan espacio para dejarse sorprender con las cosas chicas que nos pasan cada día?

Creo que la vida es muy compleja. Por momentos nos da golpes que no podemos controlar; en otros logramos tener el control y la llevamos por donde queremos; en otros nos sorprende y no estamos muy seguros si es para bien o para mal y sólo el tiempo tiende a aclararnos todo. Sin embargo, más allá de cómo gire la rueda de la fortuna (que siempre está en movimiento!!!), creo que ser feliz es una decisión y un ejercicio que se aprende siempre que haya voluntad.  Es entender que si esperamos a tener todas las cosas que anhelamos: una gran casa, el mejor auto, miles de viajes, un trabajo que se haga por si solo, la pareja perfecta, y así cuantas cosas se nos pasen por la cabeza, siempre vamos a estar desconformes. Ojo, no digo que haya que ser conformista, ni mucho menos!!!  Para nada!  Creo que uno tiene que mentalizarse en conseguir todas las cosas que quiere y trabajar hacia eso! Pero mientras tanto disfrutar del camino, y de los golpes, el orden buscado, y las sorpresas. Aprender a ser feliz en el día a día. No perder nunca la sonrisa. Reir mucho, por las cosas buenas y graciosas, y las no tanto también!
 
Creo además, que mucha gente es miedosa y no puede salir de su zona de confort. Se quedan con lo conocido porque es más fácil, pero se pierden de vivir realmente. Esa gente me da un poco de tristeza porque no va a llegar a conocer el potencial de una vida con pasión. 

Yo trabajo internamente todo el tiempo para saber aprovechar lo que me da la vida. Intento estar agradecida por todo lo que me pasa, bueno y malo. Aprendí a no intentar entender y racionalizar todo, sino dejar que las cosas fluyan. Trabajo por que mis ojos siempre brillen, que demuestren que soy feliz, que vivo contenta, que tengo pasión.  Y busco en las demás personas lo mismo, y cuando las encuentro, en mi familia, amigos y pareja (cosa que es bastante difícil!), me enamoro de ellos y los guardo, los disfruto, y los cuido.

“I fall in love with people’s passion, the way their eyes light up when they talk about the things they love & the way they fill with light”.